La relación del emprendedor con el banco, es como una pelea en la que normalmente va en desventaja. Hoy vamos a ver en lo que falla habitualmente el emprendedor cuando se dirige al banco a pedir dinero para empezar su proyecto empresarial. Ponte en situación.
Eres un emprenededor raso, con una idea normalita, como la media de los españoles, y normalmente utilizas el banco para trámites personales habituales. De momento le exiges poco a tu banco, pero ahora te asalta una idea de negocio y quieres ponerla en marcha. No tienes dinero, no conoces a nadie que te lo preste, y decides ir al banco.
Ten listo tu plan de negocio
Como de lo que vas a hablar es de negocios el banco necesita ver un documento, en este caso un plan de empresa. Y para que el documento sea válido debes entender lo que necesita escuchar la entidad financiera de tu plan de negocio:
- Debe ser claro y conciso. Preocúpate por que sea el mejor documento de cualquier cosa que hayas hecho antes.
- Totalmente creíble y realista. Presenta acreditaciones de todo. Toda tu inversión vaya acompañada de presupuestos y documentos que demuestren que vas en serio: acuerdos comerciales, precontratos, cartas de apoyo o cualquier tipo de evidencia.
- No te confíes, aunque conozcas al personal de la oficina bancaria, compórtate como un profesional y haz una presentación de tu proyecto lo mejor que puedas.
- Controla las previsiones de gastos y de ingresos. Valora al alza las primeras y a la baja las segundas, y aún así reduce los ingresos un 30%; el banco atiende todos los días a miles de empresas y sabe de que va esto.
El foco hacia lo importante
Debes focalizar hacia el proyecto, a cómo va a ser tu modelo de negocio, de dónde van a salir tus ingresos y en qué vas a invertir.
El emprendedor comete el error habitual de, antes de reflexionar en profundidad, ir primero a buscar el dinero. Entonces, cuando se le pregunta: Si te doy hoy mismo el dinero que me pides, ¿que harías?. Y no sabe responder porque no ha planificado nada.
Vigila tu inversión
Se prudente con las inversiones. Debes elaborar un plan de inversiones para no solicitar un exceso de financiación que te lastre con una cuota de préstamo insoportable. Haz como los chinos: rebate y negocia cada euro que te vayas a gastar de entrada.
No pidas imposibles
El banco lleva años valorando proyectos y tiene unos criterios que tu proyecto no va a modificar. Por tanto, hay cosas a tener en cuenta, como por ejemplo, que el importe medio de préstamos pequeños oscila entre 25.000 y 35.000 euros, por algo será, todo lo que se suba de estos importes reduce sus probabilidades de ser concedido.
No pidas el 100% del proyecto, debes presentar siempre que tú aportas una cofinanciación de en torno a un 20%. Una situación idílica para el banco es ir a medias, es decir 5una cofinanciación del 50%, pero normalmente a eso no puedes llegar. Lo que debes tener claro es que si pides el 100% te será denegado.
Foto | 401(K) 2012
