
El
G-20 aumenta la inyección de recursos en más de un billón de dólares extra (algo más de 750.000 millones de euros), de los que 500.000 van para el FMI, que verá triplicado sus fondos. Además, se creará un Consejo de Estabilidad Financiera (FSB en sus siglas en inglés) para alertar de los riesgos macroeconómicos y financieros. Esos son los dos grandes pactos acordados hoy por los líderes del G-20 reunidos en Londres para superar la crisis económica global y evitar que se repita.
Se comprometen a reunirse antes de final de año así como a acometer cuanto antes estas dos decisiones fundamentales, amén de algunas más coyunturales y de brindis al sol en forma de buenos deseos. La creación de la FSB es una buena noticia. Seguramente tardía. Los ministros de economía de los diversos países serán informados esta misma semana de su funcionamiento para que actúen de forma paralela.
Comunicado final de la Cumbre del G-20 (en inglés) (PDF – 169,7Kb)