España está entre los 10 países más caros en todas las categorías comparadas con los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Así es el séptimo país más caro en la velocidad baja (hasta 2 Mbps), con 36,89 dólares; el quinto más caro en velocidades medias (de 2 a 12 Mb), con 57,9 dólares; ocupa el puesto 14 en el tramo medio (de 12 a 32 Mb); y es el octavo más caro en la de velocidad más alta (a partir de 32 megas), con 85,04 dólares. En penetración, España tampoco sale bien parado ya que seguimos por debajo de la media, con 22,2 conexiones por cada 100 habitantes
El informe, además, resalta que el método más común para la conexión de banda ancha es el ADSL (en cualquiera de sus variantes DSL) con un 58% del parque total del líneas, mientras el cable representaba un 29% y la fibra óptica un 11,5%. Es conveniente añadir que, por primera vez en el informe, se presentan datos de conexión inalámbrica: Corea (95,0), Suecia (75,6), Japón (75,3) y Noruega (72,8) tienen la mayor penetración en términos de abonados por cada 100 habitantes.
El FTTH, que ya supone el 11.5%, destaca en Japón (55%) y Corea (52%). Otros países importantes son la República Eslovaca (28%), Suecia (24%) y Dinamarca (12%).