Tras varios meses de tira y afloja, se ha acordado trasladar a la tarifa eléctrica de último recurso (TUR) el resultado de la subasta que mañana fijará el coste de la energía, uno de los componentes en el precio de la luz y que según expertos consultados por El Mundo podría superar el 2%. La factura de la luz tiene dos componentes, la tarifa de acceso, fijada por el Gobierno discrecionalmente, y la subasta de energía. Para minimizar el impacto de la subida, el Gobierno está dispuesto a dejar congelada la otra parte del recibo (el componente fijo, o peajes). Lo que parece inevitable es que suba la parte variable, con el consiguiente impacto en el conjunto del recibo. Algunos expertos dan por hecho ya que la subida media del recibo podría ser superior al 2%, a juzgar por cómo se ha comportado recientemente el mercado mayorista.
La referencia clave para establecer los precios energéticos son las subastas mayoristas que se celebran con carácter trimestral. Mañana está prevista la subasta que servirá como referencia para los precios energéticos en el ultimo trimestre del año, y su resultado será el que se traslade al recibo a partir del 1 de octubre para la parte variable, ligada al consumo. La parte variable representa en torno al 60% del recibo de la luz, por lo que una subida hipotética del 5% vendrá a representar en torno a un 3% en el recibo final.
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